Freixo, minería heroica gallega
10.09.2009 En estado ruinoso, la Asociación Patrimonio Industrial Buxa reivindica su rehabilitación ·· De esta explotación en Monforte y de A Silvarosa, en Viveiro, salió hierro para la industria bélica alemana ·· Centenares de obreros trabajaron en precarias condiciones laborales.
Vista de las arruinadas instalaciones de las minas de Freixo, en la parroquia de Marcelle en Monforte FOTO: Angar |
Las minas de hierro de Freixo, en Monforte; las de A Silvarosa, en Viveiro; Vilaoudriz, en A Pontenova, o las de estaño y wolframio de Fontao, en Vila de Cruces y San Finx, en Lousame son ejemplos de la minería heroica en Galicia. Muestras de nuestro patrimonio industrial que languidece en la ruina y el olvido. Un recurso infravalorado, susceptible de ser recuperado como atractivo turístico. La explotación de Freixo -situada en la parroquia de Marcelle en Monforte de Lemos- junto con la de A Silvarosa -en el municipio de Viveiro- suministraron, desde principios a mediados del pasado siglo, hierro para la industria pesada bélica germana, sobre todo para la maquinaria de guerra del III Reich.
Ingeniería germana
El ingeniero alemán Guillermo Cloos, que también ostentó el cargo de vicecónsul de su país, fue el encargado de ponerlas en marcha. En el caso de Freixo, Cloos se desplazó a Monforte en los años veinte, para hacerse cargo del yacimiento de Freixo, que explotaba la firma Minerales de Hierro de Galicia.
Al igual que había hecho en A Silvarosa, en Viveiro, el ingeniero alemán, entre 1924 y 1925, puso en marcha un funicular, de los primeros que funcionaron en Galicia, para facilitar el transporte desde la mina a la estación de ferrocarril de Canaval, en Sober, un trayecto de unos ocho kilómetros, donde el mineral era cargado en trenes y transportado al cargadero vigués de Rande, para su traslado en barcos de vapor a Alemania, donde abastecía la pujante industria pesada.
Bajo la dirección de Guillermo Cloos, el yacimiento de Freixo funcionó a pleno rendimiento hasta 1931, con una nómina de 300 trabajadores. En ese año, las reivindicaciones sindicales, debido a las precarias condiciones de trabajo y a los bajos salarios de los obreros, desataron el enfrentamiento contra la gerencia de la mina, que no se plegó a las demandas de los mineros. En agosto de 1931, los trabajadores iniciaron una huelga que mantuvieron durante dos años. La mina cerró al final de la Segunda Guerra Mundial. Una nueva firma la reabrió en 1948, para cerrar definitivamente en 1959.
La Asociación Galega do Patrimonio Industrial Buxa, que preside el profesor Manuel Lara Coira, reivindica la recuperación, rehabilitación y reconstrucción de este patrimonio industrial gallego, así como su difusión y promoción, como una parte de nuestra historia, protagonizada por miles de mineros anónimos que trabajaron en condiciones precarias y malsanas en las entrañas de la tierra.
APUNTES
La primera carga salió de Rande
·· El vapor Estoril, en 1926, embarcó en el cargadero vigués de Rande el primer cargamento de mineral de hierro extraído en la mina de Freixo para la industria alemana, tal como atestiguó una histórica instantánea del fotógrafo gallego Pacheco.
Reivindicación salarial y huelga
·· En sesión plenaria de 15 de junio de 1931, la corporación monfortina dio lectura a un escrito del Sindicato de Obreros Mineros en el que demandaban una subida salarial del 50%. El rechazo por la patronal minera provocó el inicio de una larga huelga.
Coletazos finales, la visita de Solís Ruiz
·· Cuando Freixo daba sus últimos coletazos como explotación minera, los trabajadores reciben con una pancarta, en 1958, al ministro franquista y Delegado Nacional de Sindicatos, José Solís Ruiz, en una visita que efectuó a la capital de Lemos. No evitó el cierre.